Sobre nuestra comunidad

La práctica de DBT-EP se fortalece cuando se comparte con responsabilidad y propósito. Nuestra Comunidad Iberoamericana de DBT-EP nace de una necesidad profunda: aliviar el sufrimiento asociado al trauma en nuestra región, cerrar brechas de acceso al conocimiento y unir a profesionales que, desde distintos países y realidades, buscan acompañarse con rigor y humanidad.

No somos una entidad que certifica; somos un espacio seguro para estudiar, reflexionar y aplicar el modelo con respeto, ética y fidelidad a la evidencia. Creemos que el dolor humano exige cuidado y que la práctica clínica del trauma requiere comunidad, no competencia.

Ser parte de esta comunidad implica construir juntos, compartiendo esfuerzo, criterio clínico y responsabilidad profesional. Es un espacio para:

Conectar con profesionales de distintos países de Iberoamérica, compartiendo experiencias reales, preguntas y desafíos clínicos relacionados con el trauma y el uso de DBT-EP.
Acceder a recursos rigurosos seleccionados a partir de literatura científica y criterios de adherencia al modelo.
Participar en actividades de actualización y reflexión, como diálogos profesionales, espacios clínicos, revisiones de investigación y análisis del modelo en distintos contextos.
Sostener un compromiso ético, protegiendo la dignidad de las personas que atendemos y evitando usos inapropiados o sensacionalistas del protocolo.